El ciclismo es un mercado en continuo progreso y cada vez vemos que sacan al mercado más sistemas, modelos y componentes de todo tipo. Hace ya unos años que el sistema tubeless se presentó en sociedad para revolucionar el montaje llanta-cubierta de nuestras ruedas de MTB. Y desde entonces podrás escuchar mil opiniones de todos los ciclistas dando su voto a favor o en contra de este sistema y es un debate que seguirá en todas las charlas de cualquier grupeta.
En este artículo no pretendemos posicionarnos por ninguno de los dos sistemas, pero sí presentaros las ventajas e inconvenientes de cada uno de ellos.
Cámaras de aire y su facilidad
Esta ha sido la opción desde siempre, han evolucionado de mayor o menor manera, pero siempre han estado ahí como opción, aún con la salida del tubeless al mercado las cámaras de aire aún siguen siendo de las más demandadas por los usuarios y no sólo por ser más económica, sino por sus ventajas que os comentamos a continuación.
Por muchas controversias que escuches sobre las cámaras, hoy por hoy es la opción más sencilla a la hora de reparar un pinchazo, es verdad que si no hay ningún problema un pinchazo en un tubeless se puede solucionar rápidamente, pero seguramente pueden aparecer algunos inconvenientes. Cambiar una cámara suele ser algo muy sencillo y rápido y si tienes un poco de práctica aún más.
Además hoy en día las cámaras las podemos encontrar con líquido antipinchazos que pueden durarnos hasta 12 pinchazos siempre y cuando no se produzca un corte.
En definitiva la cámara suele ser la opción más sencilla, más fiable y más barata, además está comprobado que cuando vamos en ruta y el tubeless falla no hay otra opción que poner la cámara.
Ventajas del sistema tubeless
El sistema tubeless se caracteriza en que nuestras ruedas de MTB trabajen sin cámara interior, es decir, es la cubierta la que se infla directamente llevando en su interior algún tipo de líquido sellante para reparar pinchazos.
La mayoría de bikers adeptos a este sistema los oirás decirte que todo son ventajas, que los pinchazos casi desaparecen, etc, etc, pero no todo es tan bonito como lo pintan.
En primer lugar para incorporar este sistema a tu bicicleta MTB, debes hacerte con unas cubiertas especiales “Tubeless Ready” tienen los flancos laterales más robustos y por consecuencia son también más caras que las cubiertas normales, por otro lado tus llantas deben ser compatibles con este sistema y en caso de no serlo hay unos kits que convierten tus ruedas normales en tubeless, pero hacer esa conversión mejor llévala a un sitio donde tengan un buen taller especializado, para evitarte problemas de pérdida de aire, de posibles reventones, destalonamientos, etc… Aún así el líquido es recomendable cambiarlo cada 2 o tres mese para garantizar su efectividad antipinchazos
Un sistema tubeless también tiene sus ventajas, en primer lugar los pequeños pinchazos los sella rápidamente el líquido antipinchazos que va en el interior de la cubierta, lo que reduce nuestros pinchazos considerablemente, además nos permite llevar presiones más bajas en las ruedas sin miedo a llantear o pellizcar la cámara, por lo que conseguiremos más tracción.
Es difícil decantarse por alguna de las dos opciones, ya que cualquiera debidamente instalada es buena. Por lo que amigos lo mejor es siempre llevar unas cámaras encima sea cual sea tu sistema, ya que son las únicas que nos sacarán del apuro.
